Cutículas. ¿Amarlas o quitarlas?

Si eres una persona que le gusta tener una manicura perfecta, entonces es posible que hayas pensado en cortar tus cutículas o ya lo hayas hecho. Me encanta que te preocupes por el cuidado de tus uñas y estés interesado en aprender más acerca de la importancia de las cutículas. Contestando la pregunta del título… Debemos amarlas. Descubre por qué y cómo darles ese amor que merecen. 

Estas son algunas recomendaciones para cuidar tus uñas y cutículas sin riesgos:

Cuidado con el salón de uñas

Es importante evitar cortar las cutículas, especialmente en un salón de uñas, ya que esto puede provocar desgarros dolorosos en la piel y aumentar el riesgo de infecciones. Si decides ir al salón, asegúrate bien que utilicen productos desinfectantes y equipos esterilizados antes de comenzar cualquier procedimiento. Hay muchos virus y bacterias que se pueden pasar a tus manitas si no se tiene cuidado con esto. 

Además, al eliminar las cutículas, la protección natural de nuestras uñas se ve comprometida, y eso podría llevar a que las uñas se debiliten y no crezcan como quisiéramos. Muchas veces esto puede dar lugar a desniveles en tus uñas.

Pero no te preocupes, hay alternativas más amigables para tus cutículas. En lugar de cortarlas, puedes pedirle a tu estilista que las empuje suavemente hacia atrás, lo que es mucho menos riesgoso y sigue dejando tus uñas luciendo bonitas. También es importante mantener las cutículas bien hidratadas con cremas o aceites específicos. De esta forma, ¡tus manos lucirán impecables y tus cutículas te lo agradecerán!

¿Cutículas resecas?

Cortar las cutículas puede hacer que se sequen demasiado, lo que provoca que las uñas se agrieten y se pelen. En lugar de cortarlas, puedes usar un empujador de cutícula para empujar suavemente las cutículas hacia atrás, y luego aplicar una crema hidratante o aceite de cutícula para ayudar a mantener la zona suave y saludable.

Oops, ¿ya las cortaste? Recupéralas.

Si ya cortaste tus cutículas, no te preocupes. Puedes seguir los siguientes pasos para ayudar a que la zona sane:

1.remoja tus uñas en una mezcla de agua tibia y jabón suave durante 5 minutos para limpiar la zona.

2. Después, usa un empujador de cutícula para empujar suavemente la cutícula hacia atrás para que con el tiempo forme una cutícula sin grietas.

3. Aplica una crema hidratante o aceite de cutícula para ayudar a mantener la zona suave y saludable.